5 de julio de 2005

El cuento del chico espacial

Terminó de leer el libro, primero retrazó mas de una hora para salir y luego se daría cuenta que para regresar serían 3. Tomo el tiempo necesario hasta para releer algunos capítulos, siempre escuchó lo que necesitaba escuchar, no sabía como pero siempre respondía a muchas de sus preguntas, a su oscuridad, a su melancolía, al incierto presente, pero le gustó leer "prepárate para lo peor" creo que es algo que hacía mucho tiempo lo traía en la cabeza y no lograba acomodarlo así en solo 4 palabras, fue un tiempo muy cansado, el cuerpo se lo recordaba, como recordaba que dormir pleno era algo que tenía tiempo que solo era un recuerdo.

Luego encontró un modo para leerse, la ilusión de encontrarse en el aire, pudo dibujarle una sonrisa y emoción que cumple con el romanticismo de tantas películas… "me hubiera gustado que se tratase de un encuentro y no una despedida, tal vez una fuga! Si una fuga! (Como en las películas).

Debía haber pasado poco mas de 5 años ahí sentado, aunque lo sintió solo como un respiro corto casi como un suspiro, pero su reloj de pulsera, que comprara a razón de un regalo de cumpleaños al que nunca asistiera, que ocurrió en usar y siguió usando después de 3 meses pasada la fecha, y aunque el color no era de su agrado y la hora no hacia los cambios a tiempo dejo verle que habían pasado exactamente: "poco mas de 5 años" eso y el color de la piel sobre las manos, que por la suma de polvo de poco mas de 5 años había blanqueado y dejado una delgada capa de partículas suspendidas sobre la piel.

Estaba entonces convencido, una vez tuvo un amor, y problemas del corazón, iba al liceo a unas cuadras, los niños le molestaban por que creía que iba a ser una estrella, pero al final todos se vieron avergonzados, el día que tal cual como supernova dejo el liceo y empezó a sentarse a la orilla de los asteroides.

En el cuarto, el chico espacial callado toma un segundo para pensar que hacer. Fuera de su lugar y así sin impulso empieza a hablar, escuchando su propia voz. Por años y años no ha hecho nada? Pero en pie y en búsqueda resume sus demandas. Ella se sienta y ofrece su reloj. Y sin importarle un bledo se lo quita. (no era un regalo de cumpleaños no entregado y usado después de 3 meses pasada la fecha) El honor olvidado, has peleado hasta tener lo que quieres, trabajé y cuando las cosas se pusieron difíciles, te tornaste débil y nos abandonaste. Cerro la puerta del baño y volteó la cabeza, luego los hombros tan solo un poco (como las viejas películas del Oeste)


Instrumental


Escuche que te fue bien en la cena, te gusto la chamarra de Chris? Me recordó a Johnny, antes de que fuera electrónico…


Que tengas un buen viaje a casa, Es un buen día para volar (Leía)

5 de junio de 2005

Demonios nuestros, (cuento oscuro)

Hay veces que preferimos mirar de lado y no voltear con temor a notar que en efecto ahí esta el miedo en sí, de saber que tenemos que enfrentar y mirar de frente al miedo mismo, reflejado en nosotros mismos, a mirar a los ojos algo que queremos olvidar y en nuestro afán por olvidarlo lo vamos afirmando y colocarlo cada vez mas del lado de nuestros demonios.

Cuando se acepta que uno es parte de sus demonios, o que todos tenemos demonios, es aceptar de que llevamos un pasado oscuro, místico, que preferimos borrar, o desearíamos que nadie se acordara de aquello, pero al final son esos mismos demonios los que de nuestro lado nos ayudan a decidir con acierto cual es la ruta que se debe tomar, cual es el modo en que debemos ver las cosas, y con el tiempo nuestros demonios se convierten en “demonios nuestros”.

Ahí es donde entonces somos “nosotros”, dejamos de ser lo que ven que somos para ser lo que sabemos que somos, en la búsqueda de entender de compartir y de convivir y parecer cucharita de plata o desaparecer.

Para ver esos demonios nuestros solo hay que no tener mas vergüenza que la mirada sin velo a los ojos, y ver, que muy en el fondo un segundo se deja ver la pupila que dilata al grado que alguien que no acostumbra buscar a los demonios nuestros pensaría que la tristeza y el miedo están cambiando y un lagrima esta apunto de dejar su lugar.

Cuando uno es quien dilata! Ahí! recuerda a sus demonios, sintiendo que los esta mostrando con una sola mirada y zaz! la postura vuelve, se nos olvida que todos tenemos demonios internos, mientras buscamos el modo de evadirlos olvidando que son estos los que nos rigen.

A veces vamos perdiendo el compás, a veces vamos brillando junto a los demás… A veces quisiéramos no sentir, deliberar, todo el mundo quiere, todo el mundo quiere olvidar… déjalo para después, busca alguna solución, tal vez no necesites más, tal vez no necesites más, tal vez no necesites cosas para ser más libre, para ser más libre. (se canta)

Que si estas loco, piensas que estas muy solo, sabes bien quien eres, lo que ves es lo que hay, solo tu y los demonios nuestros.

5 de abril de 2005

El chico espacial.


Estaba el chico espacial, sentado al borde de un asteroide, mirando alguna constelación sin nombre, imaginando en ella figuras como sapos, conejos, caballos y sardinas.

Tomó un fuerte respiro y esperó…
Se puso primero como de color rojo
Luego como de un color amarillento
Pudo sentir como los ojos le saltaban
Alcanzó a sentir como su corazón se detenía
Se torno en un color muy parecido al morado
Y de pronto poco antes de verse de color azul, escucho una voz que le suspiraba;
Chico espacial! Por que tu cara es de color azul?
Y el chico espacial con su ultimo aliento muy despacito dijo;
..el ..azul ..es ..mi ..color ..favorito .. .. ..

5 de febrero de 2005

Decepcionante.

Decepcionante es que la vida se muestre brutal y cruda mente ante ti, hay días que refiero la hipocresía donde hasta en el alma mas obscura se pude ver un dejo de luz que te invita a la esperanza, a creer que existe aun la bondad en los hombres, en mi.

El cinismo de la vida te da oportunidad a creer que alcanzas a tener control de algo o de alguien, de las cosas, por que la vida es decepcionante y al final uno se va acostumbrando hasta que se es feliz aceptándolo, y eso en sí es decepcionante.

Por eso hay días que me gusta pensar; "a la mierda la verdad" pero es ahí adonde la misma verdad te lleva.

Que brutal! Que trágica! Y que corta vida!.

Todo el mundo debe amar algo.

Pero llegará el tiempo donde todos creerán que están locos, todos verán cosas no solo yo.

Ahí me encontré buscando y ahí pregunte; ¿quien eres tú? Y me respondió, Soy tu decepcionante negación.

5 de enero de 2005

El Sueño del chico espacial..


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Soñé que tenia que ir a Marte . . .
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